Estos días
hablaba con uno de los, digamos, "puristas" pseudo-revolucionarios
que se oponen radicalmente al proyecto de BCN World. Me criticaba todo, el
apoyo del PSC en el futuro complejo, la obsesión-decía-por el juego
"desmesurado", el acceso de niños y de menores de edad en las salas
de juego de azar, etc. Todo mal y todo desastroso.
Cuando terminó
le pregunté lo siguiente: en las comarcas tarraconenses tenemos 70.000 parados
censados y un 25% de la población en parámetros de riesgo de pobreza. ¿Qué
hacemos con todas estas personas y sus familias? Tienes alguna alternativa para
crear, aquí y ahora, miles de nuevos puestos de trabajo que den respuesta a las
necesidades de estas personas?.
Primero
enmudeció, después me respondió con una serie de generalidades sobre la
revolución futura y los modelos y paradigmas teóricos alternativos. Conclusión:
ninguna respuesta real a la dramática situación de emergencia social que se
vive a pie de calle.
Mucho se ha
hablado de BCN World pero no siempre con rigor. Por tanto, creo que es
necesario explicar el proyecto de acuerdo con la realidad objetiva y después
que cada uno saque sus propias conclusiones.
Así, la
inversión total se eleva por encima de los 47.000 millones de euros y la
creación de nuevos puestos de trabajo puede llegar a un máximo de 30.000 nuevos
empleos. De verdad podemos rechazar alegremente un volumen inversor y de
generación de empleo de esta magnitud? Yo creo que no. El tren de las
oportunidades sólo pasa una vez en la vida (o dos, si contamos lo que supuso
para la Costa Dorada la construcción de Port Aventura) y no lo podemos dejar
escapar.
Significa esto
que todo el conjunto del proyecto sea maravilloso e inmejorable? En absoluto.
Es obvio que tenemos que seguir trabajando para conseguir profundizar en las
ventajas que supondrá para Salou y por el conjunto de las comarcas
tarraconenses este nuevo proyecto. Por ejemplo, uno de los puntos más
importantes que hemos conseguido introducir los socialistas en el acuerdo final
es la creación de un fondo social de más de 47 millones de euros dirigido
directamente al territorio. Esto significa más dinero para los trabajadores,
asociaciones sociales, de minusválidos, etc. de nuestras comarcas. Ahora el
reto y el compromiso es trabajar para conseguir que desde el territorio
gestionemos lo que nos afecta y no desde un despacho de Barcelona.
Otro equívoco
existente es el que afirma que los niños estarán expuestos a los
"peligros" de las zonas de juego. Falso. El acuerdo explícitamente da
garantías para evitar el acceso de los menores a los casinos y tampoco es
cierto que el conjunto del proyecto de BCN Word sea un inmenso espacio
destinado al juego. Por el contrario, los casinos sólo representan el 15% del
conjunto del futuro complejo. El resto estará formado por centros de
convenciones, hoteles, restauración, teatros, nueva oferta comercial, etc.
Salou no es
Macao, ni las Vegas, ni lo queremos ser. Nosotros tenemos una identidad
cultural, histórica, una manera de ser de los salouences que no ha de
desaparecer, sino que se ha de reforzar con esta nueva oportunidad que nos
brinda la historia.
En definitiva,
creo, honestamente, que Salou y el interés general han ganado con el acuerdo
definitivo. Los socialistas de Salou seguiremos trabajando, tal y como lo hemos
hecho hasta ahora, para conseguir reducir las cifras de parados. Para nosotros,
la principal satisfacción será ver como se empiezan a firmar contratos de
trabajo por parte de Salouences, que ahora están en el paro, una vez el
proyecto se empiece a desarrollar y convertirse en realidad. Este es el empeño
que nos anima a seguir trabajando y que nos hace decir sí, con convicción, a BCN
World.
Article de Toni Brull publicat al Diari de Tarragona
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